Todo tiempo futuro fue peor
Anoche se sobrepuso a las balas que lo acribillaron y huyó de la policía entre la multitud.
Se escondió en la copa de un árbol, se le rompió la rama y terminó ensartado en una verja de hierro. Se desprendió del hierro, se durmió en un basural y lo aprisionó una pala mecánica. La pala lo liberó, cayó sobre una cinta transportadora y lo aplastaron toneladas de basura. La cinta lo enfrentó a un horno, él no quiso entrar y empezó a retroceder.
Dejó la cinta y pasó a la pala, dejó la pala y fue al basural, dejó el basural y se ensartó en la verja, dejó la verja y se escondió en el árbol, dejó el árbol y buscó a la policía.
Anoche puso el pecho a las balas que lo acribillaron y se derrumbó como cualquiera cuando lo llenan de plomo: completamente muerto.
En: Todo tiempo futuro fue peor (2004).
Raúl Brasca
(Buenos Aires, 1948)
Estudió Ingeniería química. Ha publicado una importante obra como antólogo, narrador y crítico literario, actividad que ejerce en el diario La Nación. Su último libro de microrrelatos se titula Todo tiempo futuro fue peor (Thule, Barcelona, 2004). Entre las muchas recopilaciones de textos narrativos brevísimos que ha compuesto solo voy a citar tres: De mil amores (Thule, 2005); Antología del cuento breve y oculto (Sudamericana, Buenos Aires, 2001), y la reciente Comitivas invisibles. Cuentos breves de fantasmas (Desde la gente, 2008), las dos últimas realizadas en colaboración con Luis Chitarroni. Está considerado como uno de los mejores autores de microrrelatos del mundo hispano y como tal figura en las mejores antologías sobre el género.
No hay comentarios:
Publicar un comentario